Descripción
El CERCIDIPHYLLUM japonicum es un árbol maravilloso por muchas razones. Su follaje verde y casi redondo con pecíolos rojos (ver foto) es simplemente espectacular.
Además, su silueta es bastante elegante gracias a sus ramas muy finas. Este aspecto elegante se mantiene incluso en invierno, cuando pierde su follaje.
Aunque a veces se menciona que este árbol puede alcanzar entre 10 y 45 metros de altura, es importante saber que crece muy lentamente y no superará los 6 metros en Europa después de veinte años.
Por último, el espectáculo alcanza su punto álgido en otoño. En ese momento, el follaje comienza a mostrar colores llamativos como verde, amarillo, naranja y rojo. Observe las fotos anteriores. Cuando las hojas se sequen, comprenderá su nombre katsura, ya que exhalará un agradable perfume a caramelo en su jardín.
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Cómo plantar el CERCIDIPHYLLUM japonicum
Plante el katsura a pleno sol o en semisombra, ya sea en un macizo o como árbol aislado. Prefiere los lugares húmedos, e incluso empapados.
El suelo puede ser ligero, normal o pesado, con un pH ácido, neutro o calcáreo.
En caso de necesidad, puede podar el katsura en febrero o marzo, antes de que aparezcan los nuevos brotes.
Esta planta es perfectamente resistente al frío, incluso a temperaturas inferiores a -20 °C.
Para una preparación óptima del contenedor o del hoyo de plantación, hemos elaborado unas instrucciones detalladas que puede consultar aquí. Le invitamos a consultar también nuestros consejos sobre cómo regar correctamente y ahorrar agua aquí.
Historia y Origen
La especie CERCIDIPHYLLUM japonicum se clasifica como «amenazada» en China. Sin embargo, si se incluyen las poblaciones japonesas, se considera de «preocupación menor». Su hábitat natural también se encuentra en estos dos países.
Antiguamente, los katsura en China eran llamados «CERCIDIPHYLLUM japonicum var. sinense». Sin embargo, hoy en día se consideran como una misma especie.
El C. japonicum es un árbol ornamental muy apreciado en Japón y en muchos otros países, especialmente por su follaje inusual, su elegante diseño y el perfume a caramelo que desprende en otoño.
Esta especie es dioica (con individuos unisexuales distintos) y también es conocida por su resistencia a los parásitos.
Los japoneses los aprovechan para la producción de madera de construcción. Además, debido a su dureza, se utiliza para la fabricación de goban (tableros para jugar al go).
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